Se dice que las crisis sociales, como el coronavirus, pueden acelerar los cambios culturales. Uno de estos puede ser el avance hacia mayores niveles de corresponsabilidad al interior del hogar y que las empresas fomenten las políticas que faciliten el cuidado de personas dependientes, tanto para hombres como mujeres. En la situación actual, donde hay varios hogares con ambos padres trabajando bajo la modalidad de teletrabajo, lo esperado sería que la pareja organice su vida laboral incluyendo la educación de los hijos (quienes se encuentran estudiando bajo metodologías digitales), el cuidado de personas dependientes y el cuidado del hogar.
En el Centro Trabajo y Familia del ESE Business School, junto al IESE de España, medimos durante 15 días a más de 1.000 personas en la implementación de teletrabajo en momento de crisis. (que no es igual al teletrabajo en condiciones normales).
María José Bosch
30 de abril del 2020