El Centro Innovación y Emprendimiento (CIE) del ESE Business School, realizó un seminario en formato online titulado "¿Cómo vinculamos empresas y universidades a través de transferencias tecnológicas?".
Para ello, se contó con la presentación de Ignacio Merino, quien es director ejecutivo de HubTec; Gerard Casaubon, encargado de innovación de productos en el Centro de Investigación e Innovación en Cocha y Toro; y de Iván Díaz-Molina, director del CIE.
La reunión, tuvo como objetivo contribuir a tender puentes entre la academia y la industria para acercar las necesidades a sus soluciones, y también poder iniciar un diálogo entre ambos sectores, lo cual es esencial para el desarrollo tecnológico del país.
Con unas palabras iniciales del director general de la Escuela, Raimundo Monge, se dio inicio al seminario, quien destacó "la universidad hace un esfuerzo importante de generar conocimiento y de incorporarlos dentro de la comunidad científica y académica, pero también para incluirlos en el resto de la sociedad". En ese marco, agregó que es fundamental generar lazos de confianza y de conocimiento mutuo entre la academia y las empresas ya que "ambos nos necesitamos y complementamos, y al final el trabajo colaborativo ayuda al desarrollo del país".
Por su parte, Ignacio Merino abordó el tema desde la mirada de Hubtec, un centro de transferencia tecnológica y de alianza público-privada entre universidades, centros de investigación y el gobierno. El director ejecutivo explicó que, desde el lado de la academia el gran desafío en este contexto es que desde la investigación básica, la cual es basada en la curiosidad, se tiene que transitar a que se genere un impacto en la sociedad a través del vínculo academia-industria, esto mediante un proceso llamado transferencia tecnológica. (Ver presentación)
"Nos hemos dado cuenta de que el vínculo entre la universidad y la industria es una relación vital para el desarrollo de Chile, de nuevos negocios y de la supervivencia de las empresas", indicó Ignacio Merino.
Del mismo modo, comentó que existen ciertas brechas en el desarrollo tecnológico que es importante considerar, como es la madurez financiera en el proceso de innovación, vinculación y gestión.
Por su parte, Gerard Casaubon habló desde su experiencia en la Viña Concha y Toro, donde hizo un repaso de cómo la empresa se ha movido en esta relación academia-industria en los últimos veinte años, comentando que comenzaron esperando encontrar en la universidad un conocimiento y soluciones a desafíos tecnológicos y ventajas competitivas. (Ver presentación)
"En los últimos dos años hemos ido tratando de sistematizar lo que es la ambidiestralidad, y con la ayuda de la academia, hemos podido profundizar cuáles son las habilidades que nuestra alta dirección debiese desarrollar, para poder explotar en conjunto al centro de investigación", agregó Gerard Casaubon.
Por otro lado, el director del CIE, Iván Díaz-Molina explicó que desde el ESE han tratado de crear un ecosistema porque la transferencia tecnológica es un trabajo de muchos, junto con una mirada desde la universidad hacia la industria para poder identificar las necesidades. (Ver presentación)
Tras varios años de trabajo, el profesor comentó que existen varios desafíos para la academia, donde destacó la falta de incentivos para potenciar la transferencia tecnológica en la comunidad, desarrollar una política de esto a nivel general y particular para cada unidad académica y potenciar la participación de otras instituciones para articular en forma adecuada y expedita la transferencia tecnológica, entre otros más.
Parte de la modalidad del seminario, y para hacerlo más participativo, se realizaron salas de discusión temática, donde los inscritos pudieron acceder a una de las sesiones para debatir sobre el tema del seminario, pero desde miradas diferentes.
Dentro de las conclusiones que rescató uno de los grupos de trabajo, fue la necesidad de vincular tempranamente la universidad y la industria y conversar los desafíos de cada una de las partes para ahorrar tiempo o minimizar riesgos.
Por otro lado, el segundo grupo destacó el conocer el ciclo del negocio y saber qué madurez tiene este para así salir a buscar el conocimiento y saber de dónde viene.
Junto a ello, se rescató la necesidad de ciertas habilidades que requiere la exploración, la que tiene que venir de la cabeza de la organización para así alinear a las áreas hacia los objetivos en común.
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