13 de septiembre

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Círculo de Directores analizó resultados de estudio “Sucesión de la Gerencia General en la empresa chilena”

¿Están las empresas chilenas preparadas para un proceso de sucesión en sus gerencias generales?, ¿cuentan las empresas del país con un plan eficiente y rápido para el proceso de sucesión?, fueron algunas de las preguntas que se debatieron en el encuentro organizado por el Círculo de Directores, entidad que es apoyada por el Centro de Gobierno Corporativo del ESE Business School de la Universidad de los Andes.

Durante el encuentro, Alfredo Enrione, director del Centro de Gobierno Corporativo del ESE Business School, presentó los resultados del estudio realizado por él y por la investigadora del mismo Centro, Catalina Berner, el cual tuvo como objetivo investigar si las empresas chilenas tienen un plan de acción correcto para los procesos inesperados de sucesión a nivel de gerencia general.

Antes de su presentación, el presidente del Círculo de Directores, Lionel Olavarría, dirigió unas palabras a los asistentes.

"Ser director es pertenecer a un grupo mínimo de la población mundial que es capaz de tomar decisiones de alto impacto, de inversiones o de otro tipo, del negocio en general, y que impactan a colaboradores, trabajadores, clientes, a la competencia, a la comunidad, a los inversionistas. El impacto que se genera con las decisiones que tomamos a diario en las reuniones de directorios es enorme. Por tanto, hacerlo bien es tremendamente importante para seguir haciendo sustentable el sistema de libre mercado", sostuvo Olavarría.

Posteriormente, Alfredo Enrione se refirió a los costos que implican para las empresas el no estar preparadas para los procesos de sucesión, en donde sostuvo que "el que las empresas no cuenten con un plan de acción para reemplazar a su gerente general, hace que se produzca un impacto en el desempeño de la empresa; incertidumbre, que repercute en el precio de la acción y valor de la compañía; riesgo de pérdida de talento, debido a la incertidumbre; paralización de decisiones, iniciativas y acuerdos relevantes de la compañía; plazos y costos extraordinarios en proceso de búsqueda; y mayores costos y riesgos de traer un outsider", explicó.

Así también, el director del Centro de Gobierno Corporativo mostró los resultados del estudio, que contó con las respuestas de 192 personas, representantes de 159 empresas, en los que a partir de los datos obtenidos elaboraron un índice de preparación para la percepción.

"Este índice tiene tres componentes; anticipación, hasta dónde la compañía está preparada para un evento de corto plazo; ownership, hasta dónde el director entiende que es su responsabilidad el tema de la sucesión y realmente asumen esta responsabilidad; y por último comparando lo que son las buenas prácticas, es ver hasta dónde la organización aplica estas sugerencias de buenas prácticas", comentó Enrione.

De esta forma, la encuesta arrojó información relevante que Alfredo Enrione mostró a los asistentes.

"Cuando comparamos por tipo de propiedad, las empresas que están más preparadas para casos de sucesión, son las empresas de propiedad comunicacional, mientras que las peor preparadas corresponden a las de propiedad estatal. Así también, el 45% de las empresas no tiene candidatos internos preparados para asumir en el corto plazo. Solo el 35% de las empresas del IPSA tendría una respuesta a su sucesor en menos de tres meses, y el 42% no tiene candidato interno. Solamente el 45% de las empresas ha puesto el tema en el calendario y el 8% tiene un comité especializado", expuso Alfredo Enrione.

Ante estos resultados, el director del Centro de Gobierno Corporativo comentó que "si nosotros pensamos en el plan de sucesión como un evento aislado o asociado a una tragedia en que al gerente general se lo llevó el competidor o por fuerza mayor, hay que tener esto como una tarea permanente del directorio. Y por lo que vemos acá en Chile los directorios no están asumiendo esta tarea".

Luego de la presentación del estudio, se realizó un panel de conversación compuesto por Paul Schiodtz, presidente de la Asociación Chilena de Seguridad; Gonzalo Said, director de Coca-Cola Andina; Alan MacDonald, Senior Partner de Kingsley Gate Partners, quienes comentaron los resultados expuestos.

Paul Schiodtz sostuvo que "sea cual sea el caso en el que el gerente general ha salido de la empresa, el directorio tiene que actuar de manera muy parecida, ya que para estos casos se requiere estar preparado de una manera muy sindical, asegurándose de que el talento exista al interior de la organización, para lo que es necesario tener un estudio continuo sobre el desempeño de los posibles ejecutivos y entender cómo van cambiando los requerimientos de la empresa en el tiempo".

Por su parte, Gonzalo Said, director de Coca-Cola Andida, comentó que "hoy nosotros como empresa nos sentimos tranquilos, si bien es cierto que siempre un cambio inesperado es un tema complejo, nosotros a nivel de directorio hemos tomado este tema de manera seria y proactiva, tanto en el proceso de sucesión como en el desarrollo del talento dentro de la empresa para ver los cargos más críticos de ser reemplazados en cualquier momento".

En cuanto a Alan MacDonald, este comentó "no me sorprenden para nada estos resultados, la experiencia práctica dice que la mayoría de las compañías en Chile no están preparadas o no están con un plan de sucesión claro o definido para buscar a su futuro CEO. Para los directores este es un tema pendiente que tienen que pensarlo y analizarlo seriamente".

La actividad finalizó con un espacio de preguntas, en donde el público pudo interactuar con los panelistas e intercambiar opiniones.