Muy lento parece avanzar la reforma tributaria, especialmente frente a la necesidad de reimpulsar el crecimiento en un escenario externo más adverso. El problema es que uno de los aspectos más importantes en esa dirección, la reintegración del impuesto a la renta, parece ser el más controvertido.La reintegración permite recuperar la equidad horizontal entre los impuestos al trabajo y al capital, evitando que el capital nacional quede en una posición de desventaja, no sólo frente a los ingresos del trabajo, sino también frente al capital extranjero.
María Cecilia Cifuentes
16 de Octubre del 2018