La respuesta a esta pregunta es para muchos un no. En los últimos dos años ha habido una salida importante de inversiones al exterior debido a la incertidumbre local y al interés de los inversionistas de diversificar geográficamente sus carteras, también en los activos inmobiliarios. Las decisiones de inversión están guidas por los "animal spirits", como señaló Keynes hace casi cien años, y estos espíritus están mirando fuera de nuestras fronteras. Quizá estamos dejando de ver oportunidades en nuestro país, concretamente en los activos inmobiliarios. Es lo que intento mostrar en estas líneas.
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José Miguel Simian
31 de agosto del 2022