La reputación corporativa es uno de los elementos clave para el éxito de una empresa. Se trata de cómo los consumidores, los medios de comunicación, los inversores, los gobiernos y otros grupos vinculados a la empresa perciben a la misma.
Esto significa que todos los empleados y los directivos deben estar conscientes de su responsabilidad de mantener y mejorar la reputación de la empresa. ¿Pero será sencillo?¿Existen algunos criterios a seguir?
Continúa leyendo este artículo para saber qué es la reputación corporativa, cómo se construye, cómo se puede mejorar, y conocer su importancia real.
Para empezar, es importante entender qué es exactamente la reputación corporativa. La reputación es un activo intangible que se construye a través de la gestión de la marca, el servicio al cliente, la atención a la prensa, el liderazgo y la cultura de la empresa.
Estas acciones ayudan a la empresa a construir una imagen positiva entre sus clientes, inversores y otros grupos de interés. Es decir, se refiere a la forma en que la empresa es percibida por el resto de la sociedad.
Esta percepción se ve afectada por la calidad de los productos, la responsabilidad social y la ética de la empresa, así como por su nivel de servicio al cliente.
Cuando una empresa tiene una buena reputación, los clientes están más dispuestos a recomendar su producto o servicio a otros y como consecuencia invertir más en él.
Gracias a ello la empresa empieza a destacarse sobre la competencia, y a su vez, contribuye al éxito a largo plazo. Además, una buena reputación es vital para la fidelización de los clientes y la lealtad de los empleados.
¿Una buena reputación es una casualidad? Para nada, detrás de ello existen estrategias para lograr ese anhelado reconocimiento y conectar con los consumidores de forma más eficaz.
Cabe mencionar que una buena reputación corporativa tiene una percepción externa e interna. Y ambas deben ser tomadas en cuenta de la misma manera.
Es decir, para que una empresa tenga éxito para cualquier proyecto, y en este caso obtener una buena reputación, necesita que sus colaboradores trabajen en un ambiente donde estén seguros de que sus directores cumpliran los acuerdos y normas establecidas. ¿Cómo diferenciamos estos tipos de reputación?
Reputación corporativa interna: Es la percepción que tienen los empleados de la empresa y su cultura. Esta reputación se basa en factores como el compromiso con la ética empresarial, la satisfacción del empleado, el liderazgo y las prácticas de gestión.
Reputación corporativa externa: Es la percepción que tienen los clientes y el público en general acerca de la empresa, sus productos y servicios.
¿Gestión de la reputación corporativa? Se refiere a las estrategias y acciones que una empresa toma para construir y mantener una buena relación entre los clientes y otras partes interesadas. Enterate de porque estan importante un programa de desarrollo empresarial
Estas son algunas de las estrategias de gestión de la reputación corporativa que pueden ayudar a una empresa a mejorar su imagen y su credibilidad:
Existen componentes que para las empresas son más importantes que otros, entre los principales se pueden encontrar la confianza, la credibilidad, la responsabilidad y la imagen.
La confianza, se refiere a la seguridad que tienen los clientes, partes interesadas, y el público en general de la empresa
La credibilidad, hace referencia a la capacidad de una empresa para cumplir sus promesas y generar resultados.
La responsabilidad, se refiere a la responsabilidad social y la ética de la empresa, así como a sus prácticas comerciales.
La imagen de la empresa, se refiere a la percepción general de la empresa que los clientes, empleados y el público en general tienen de ella.
Después de una extensa búsqueda de estrategias para implementarlas en la organización, se notarán los cambios de forma gradual y no de forma inmediata. Las prácticas aplicadas como la de responsabilidad social o los esfuerzos de transparencia, construirán una relación de confianza en los clientes.
Como consecuencia la empresa mejora la imagen de marca, el desempeño de sus colaboradores, mejor posicionamiento en comparación a la competencia y por último generar más ingresos.
Por eso es muy importante que las empresas comprendan el gran valor que tiene la reputación corporativa y se esfuercen por mejorarla.