La Dirección Alumni organizó una nueva charla de continuidad, en la cual se abordó cómo la invasión rusa a Ucrania pareciera confirmar el inicio de una nueva era en la geopolítica global. En la oportunidad, el encargado de ahondar en la temática fue Juan Ignacio Brito, periodista de la Pontificia Universidad Católica y máster en relaciones internacionales, además profesor e investigador de Signos UANDES.
Durante la jornada, el académico analizó las diferentes distribuciones de poder que han ido predominando en el mundo a lo largo de los años, como también el rol que tiene Chile en este escenario.
Respecto al conflicto y la "operación militar especial" planteada por Rusia, Juan Ignacio Brito comentó que "estamos ingresando a un mundo lleno de riesgos", destacando que el conflicto supone un desafío para occidente y que esto da paso a que el orden internacional deje atrás la unipolaridad de la posguerra fría y se adentre a uno disputado por diversas potencias antagónicas.
Es así como Juan Ignacio Brito explicó que el momento unipolar basado en la hegemonía de Estados Unidos pierde poder. Es decir, que el país norteamericano deja de ser la superpotencia única que manejaba los intereses globales con capacidades de actuar política, económica y militarmente en todo el planeta.
Lo anterior, explica el académico, da paso a "la ley del más fuerte" o la realpolitik, donde pasan varias cosas de manera simultánea: otras potencias comienzan a adquirir voz propia; China se convierte en un rival para Estados Unidos; la Unión Europea no logra articular una política exterior y de defensa común con un gasto militar bajo; y con Rusia insatisfecha bajo el gobierno de Putin, quien se muestra descontento con su posición en el mundo e inicia un movimiento restaurador de su estatus de superpotencia.
"Estamos en un mundo peligroso, que ya no es estable en su configuración de poder, que facilita la posibilidad de que se produzca un conflicto como el que estamos viviendo, que involucra a una superpotencia y la economía", detalló el académico.
En lo que respecta a Chile, mencionó que eventualmente va a tener que tomar una posición, explicando que "nosotros, como política exterior, una neutralidad no nos va a servir de mucho". Además, agregó que "Chile tiene que ser astuto. Mi llamado es que tenga una diplomacia a la altura de las circunstancias".